"Se es diseñador 24 horas al día"
Juventud, frescura y tendencia son la suma que definen a Camila Otero. La diseñadora argentina nos ofrece su visión sobre una profesión enriquecedora.
Pablo Rivero. ¿Qué lugar ocupa la decoración en tu vida?
Camila Otero. Ocupa el 100% de mi tiempo, incluso fuera del estudio sigo pensando en ello. Como hace poco me dijeron: "se es diseñador 24 horas al día".
P.R. ¿Cuándo sentiste la necesidad de formarte como diseñadora de interiores?
C.O. Fue curioso, por casualidades de la vida no pude hacer la prueba de selectividad y me apunté a un FP Superior de escaparatismo. Este ciclo se instruía en la Escuela de Arte 4 de Madrid, la cual está especializada en interiorismo. Allí, los profesores, más que enseñarnos escaparatismo, nos enseñaban interiorismo comercial, que era de lo que más sabían... y tengo que agradecérselo porque ahí fue cuando me enamoré del diseño de interiores.
A partir de ese momento, cada paso que daba fue pensado para convertirme en lo que hoy soy.
"Es importante desarrollar la creatividad de las personas desde una temprana edad."
P.R. Conocemos grandes compañeros con años de experiencia y renombre. ¿Consideras qué las nuevas generaciones lo tenemos más complicado para hacernos un hueco en la profesión?
C.O. Bueno, no sé si más complicado. Es verdad que la situación está difícil, pero creo que hay una nueva ola de jóvenes emprendedores que están buscando cosas en el diseño que algunos de los grandes diseñadores no son capaces de ofrecer.
P.R. ¿Por qué?
C.O. Tanto a nivel creativo como estético creo que la nueva generación de diseñadores ofrecen ideas más frescas y potentes que los más experimentados.
P.R. Vivimos momentos de dura crisis que afecta a todos los sectores, uno de ellos en nuestro. ¿Cuáles consideras que son las claves para abrirse camino?
C.O. La clave es siempre la misma, ofrecer algo diferente y trabajar mucho. Pero sobretodo, hacerlo con ganas y disfrutando.
P.R. A lo largo de nuestra carrera nos encontramos con clientes con necesidades muy variadas. ¿Con cuál te defiendes mejor, con los que lo ponen fácil o aquellos más exigentes?
C.O. Es como el amor. Los que lo ponen fácil siempre es un placer trabajar con ellos. Pero cuando encuentras un cliente que sabe del tema y quiere lo mejor, la experiencia, aunque más difícil, resulta más enriquecedora.
P.R. ¿Cuáles crees que son las claves para conseguir satisfacer al cliente?
C.O. Considero que es muy importante conectar con él desde un principio, entender lo que quiere y su situación. Una vez que consigues eso, todo lo demás depende de ti. Tu sabes cuando el cliente quedará satisfecho o no.
P.R. ¿Crees qué un buen diseñador de interiores nace o se hace?
C.O. Es importante desarrollar la creatividad de las personas desde una temprana edad. Pero para ser un buen diseñador no solo basta la creatividad. El trabajo diario es lo más importante. Hay gente que siendo poco creativos pero trabajando mucho han llegado muy lejos y otros que juntando las dos cosas se han convertido en genios.
P.R. Defínete con una palabra.
C.O. Curiosa compulsiva.
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